Argentina y Paraguay llegaron a un acuerdo por las tarifas de la hidrovía en el Paraná

La Argentina y Paraguay llegaron a un acuerdo en el conflicto en torno de las tarifas de la hidrovía en el río Paraná.

El gobierno de Javier Milei reclamaba 30 millones de dólares de deuda pero Paraguay se negaba.

De acuerdo con el nuevo acuerdo, se aplicará una fuerte reducción de la deuda, y para el período comprendido entre el 15 de febrero de 2023 y el 31 de agosto de este año,  la tarifa establecida será de USD 0,80 por tonelada de carga. 

Desde el 1 de septiembre y el 28 de febrero del año próximo, el costo de la tasa retributiva será de USD 1,20. Los descuentos en cuestión sólo se aplicarán si el pago se efectúa dentro de los 45 días de la emisión de la factura. 

El convenio fija que a su vez que las empresas que ya hayan abonado la totalidad de la tarifa que se mantiene desde 2023 serán beneficiadas con un crédito a su favor. 

En el acuerdo fue firmado por la Administración General de Puertos (AGP), como concesionario del tramo argentino, la Cámara de Armadores Fluviales y Marítimos (Cafym), en representación de los armadores de Paraguay, y la Comisión Permanente de Transporte de la Cuenca del Plata (Cptcp), por los operadores privados de los cinco países de la Cuenca del Plata.

El Gobierno apura para fin del 2025 el llamado a licitación para concesionar la vía fluvial por los próximos 25 años.  Es un tema en el que también está muy involucrado el expresidente Mauricio Macri.

Tras el fin de la concesión a cargo del consorcio conformado por la empresa belga Jan De Null y la nacional Emepa, la Administración General de Puertos quedó a cargo de la hidrovía durante los últimos tres años.

En marzo, el Gobierno firmó con el cuerpo de ingenieros del ejército de los Estados Unidos un acuerdo de intercambio de información, capacitación y cooperación en el manejo de uno de los cursos de agua más importantes del mundo. El flujo de drogas también preocupa y ocupa a Washington.

La administración estadounidense manifestó durante la gestión de Alberto Fernández su preocupación por la posibilidad de que un consorcio chino se quedara con el control de la estratégica vía.